Decidme si yo tengo galipote en mi cabeza, si al asomarme a la historia pasada de esta tierra, hallo voces que me dicen, que me fije en su corteza, pero rasco con la uña y oigo, con tristeza, historias de silencios que hablan de pobreza, de hambre y de verguenza, de sangre en las cunetas, de bocas que se callan y ventanas que se cierran, de decadas de olvido, venganzas y condenas, de madres sin sus hijos, de pechos que se secan, de misas los domingos, de yermos en las eras, de rutas al exilio, estandartes y banderas, de beatas y obispos y de aves carroñeras. Decidme si yo tengo galipote en mi cabeza si encuentro en la vereda cruces que ya nadie recuerda.
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